domingo, 11 de enero de 2015

Disección Pink Floyd - The Endless River [2014] (**)

11-01-2015
Se promocionaba este disco como “el retorno de Pink Floyd”, “el regreso más esperado de los últimos años”, “lo nuevo de la banda más grande” … pero créanme que tuve que escucharlo sólo una vez para darme cuenta que esta vez, el marketing era puro engaño.
Sin muchas vueltas podría resumir este álbum en 4 frases:
* una banda de sonido sin película,
* el disco de una sola canción,
* la recopilación de los temas “descartes” de sus viejos trabajos o simplemente
* “regreso sin gloria”.
Hasta se podría poner en dudas el rótulo de “regreso de la banda”, ya que técnicamente no se reunieron todos los Floyd … Roger Waters (uno de sus más grandes exponentes) no fue de la partida y creo que se nota su ausencia.
Es una pena pero “The Endless River” pasará al olvido pronto, incluida su única canción con voces y letra, una espectacular “Louder Than Words” que es la responsable de cosechar las 2 estrellas con las que puntúo este disco y por la que hay que comerse 17 temas 100% instrumentales y mayoritariamente de 3 minutos de duración c/u ... y dicho sea de paso, no sé a quién se le puede ocurrir ubicarla al final del disco.
A pesar de todo esto, alguien podría preguntarse ¿entonces este álbum no suena a Pink Floyd? ¡no! claro que es Pink Floyd pero sólo una parte de ellos … como si fueran simplemente el comienzo o intro instrumental de alguna de sus genialidades. SalU2. Guille

2 comentarios:

  1. Cuando me enteré que venía este disco me ilusioné. Después supe que eran sesiones descartadas de hace 10 años y me desilusioné... Después me enteré que eran sesiones descartadas del "Division bell" y me volví a ilusionar, porque el sonido que tiene la banda en ese disco es sublime, pero me desilusioné de vuelta porque no había un reencuentro con Waters, aunque me ilusioné otra vez al enterarme que, ante todo, era un tributo a Richard Wright con sus composiciones de esos tiempos, pero me volví a desilusionar al darme cuenta que, amparados por la tecnología, podrían haber hecho lo mismo incluyendo a Syd Barret...

    Así no más mi relación con este Endless river. Aunque no lo he escuchado más que un par de veces, he podido descubrir que sí guarda algo del Pink Floyd que amamos, pero no mucho del rock que necesitamos.

    Lo que no me cuadra es que, ahora que David Gilmour cerró toda posibilidad de reunión de la banda, debieron haber tenido un adiós más espectacular y memorable que este disco menor dentro de su discografía.

    Me quedo con su último show en el Live8.

    Saludos desde Ecuador.

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  2. Hola Ale! no pudiste describirlo mejor!!! te juro que a la hora de diseccionar este disco pensé en plantearlo exactamente como lo describís…pero sin dudas no hubiera podido plasmarlo TAN BIEN como lo hiciste vos…espectacular tu aporte ¡muchísimas gracias!
    Y tal como decís, el anuncio y promoción de este disco fue un verdadero “sube y baja” de entusiasmo y desilusión…para terminar precisamente en esto, un fiasco total (lamentablemente).
    Hay veces que me pregunto si vale la pena “quemarse” de esta manera…un grupo CON MAYÚSCULAS tiene que estar a la altura de lo que fueron (y siguen siendo en los corazones de todos los que adoramos su música)…y si no, es mejor no hacer nada!
    Llamémoslo marketing engañoso, llamémoslo negocio o dinero fácil…pero Pink Floyd no se merece que su nombre pierda brillo…mejor llamémoslo “locura temporal de algunos de sus integrantes”…pero la pifieron “de acá a la China”.
    Un gran abrazo Ale y si te soy sincero, me costó escucharlo entero 2 veces…qué triste…Guille

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